La educación
comprende un proceso dinámico de aprendizaje, este se adapta a los diferentes
paradigmas que el último siglo ha tomado en consideración. En la actualidad hay una gran cantidad de metodologías
que podemos aplicar a la enseñanza de las ciencias naturales.
Actualmente
se desea generar conciencia en el estudiante sobre el papel fundamental que
desempeña en los modelos de enseñanza-aprendizaje en los cuales deja de ser un
simple espectador y pasa a formar parte activa en clase.
La
educación permite desarrollar habilidades en los estudiantes para generar un
aprendizaje significativo y hacer conciencia de los retos que tienen las
generaciones futuras, aquellos modelos implantados por los profesores en que
solo se consideraba a los alumnos como reservorios de conocimiento están quedando
atrás, a pesar de que algunas instituciones apuestan por estos modelos
ortodoxos de enseñanza.
Dicho lo
anterior se traen a la práctica dos modelos que generan un impacto en la actualidad
a nivel mundial en las últimas décadas.
El
primero es el método de indagación que fomenta una estructura de aprendizaje científica,
con estuantes participando en su propio aprendizaje de manera activa, enfrentándose
a la ciencia cotidiana.
En segundo
lugar estamos ante el enfoque integrador que genera conciencia social en sus educandos
y los guía a través de necesidades que se hacen tangibles en sus países y a
nivel mundial.
Diremos
que ambos enfoques tienen grandes virtudes, sin embargo, no podríamos mencionar
que hay una superioridad de uno sobre el otro; el lector debe generar un criterio
basado en su experiencia en el aula o conocimientos de enseñanza, para una mejor aplicación en temas de
ciencias naturales y obtener de mejor manera las ventajas de cada uno de estos.
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